-
Arquitectos: Díaz y Díaz Arquitectos
- Área: 498 m²
- Año: 2015
-
Fotografías:Héctor Santos-Díez
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Sada es una villa coruñesa situada en la comarca de As Mariñas, perteneciente a las Rías Altas gallegas, concretamente en la costa de la Ría de Betanzos, con un paisaje de excepcional belleza y un clima atlántico suave con pocas variaciones térmicas. Con 14.000 habitantes y a 20 km de la capital de provincia, A Coruña, Sada forma parte del área metropolitana.
El edificio modernista del CEIP Sada y sus contornos, construido en 1923, está dentro del PGOUM de Sada catalogado con protección estructural. Forma parte de los ejemplos de la arquitectura civil financiada por la emigración, muy abundante en la zona.
La construcción se sitúa en un solar en el borde costero, con acceso desde la Av. De Sada y sus contornos. El patio de juegos se sitúa en la parte trasera de la parcela, que posee unas magníficas vistas de la Ría de Betanzos, al estar ubicado muy por encima de la cota del Paseo Marítimo.
El edificio estaba en buen estado de conservación, pero no era capaz de satisfacer la progresiva solicitud de plazas escolares. De hecho, esta demanda se había atendido mediante la instalación de módulos prefabricados, ocupando el espacio destinado para juegos, además de suponer un efecto negativo, tanto funcional como arquitectónicamente hablando.
El proyecto plantea, en un primer lugar, la ampliación del centro, dotándolo de nuevos espacios que fuesen capaces de satisfacer las necesidades actuales, acordes con la normativa, e integrándolos funcionalmente con el edificio existente. En segundo lugar, la eliminación de las construcciones prefabricadas, devolviéndole el valor perdido al edificio modernista, además de recuperar así el espacio exterior para la zona de juegos. En tercer lugar, abrir el conjunto a las excelentes vistas que posee la parcela, buscando siempre integrarlo en el paisaje, mejorando a su vez el entorno, y redibujando la fachada marítima de Sada en esta zona.
La solución que se plantea es un edificio externo, en planta sótano, que aprovechará la pendiente del terreno hacia el Paseo Marítimo y que abrirá hacia el una fachada acristalada integrada en el talud, con el mínimo impacto visual, siendo tratada con listones de madera pintados de los mismos colores de la vegetación existente. La nueva edificación conformará un zócalo para el edificio modernista, totalmente visible. La cubierta del nuevo basamento se convertirá en el patio de juegos, con un cerramiento de parcela más permeable, para permitir las vistas al mar.
Las circulaciones interiores se resolverán mediante un sistema de rampas, creando un itinerario accesible tanto desde el acceso principal como desde el edificio existente, hasta el nuevo edificio. En el edificio existente, se reformará el acceso a planta sótano, abriendo así el núcleo de escaleras al hall de entrada. En planta sótano se reformará también la conexión con el nuevo volumen, consiguiendo la perfecta integración entre ambas edificaciones.